Podemos comenzar esta tarea con un símil entre las leyes humanas y las leyes de la Naturaleza. Dado que nuestras leyes son muchas y complejas acercamos su estructura, que en nuestro tiempo se sintetiza en forma de Constitución política. También en la Naturaleza podemos encontrar una ley de leyes, algo asimilable a una Constitución: las Leyes de la Termodinámica. Aparte de ser inmunes a la complejidad, son extremadamente relevantes y reveladoras cuando de límites biofísicos hablamos. Como las paredes de una habitación, los límites, lejos de molestar, son fuente de orden y de estructura... salvo para quien intenta sobrepasarlos a cabezazos. Lo lamento por quienes piensan que la ley de la selva está regida por la competencia y el darwinismo social y que habrá un bonito podio para quienes consigan eliminar a sus congéneres y resto de seres vivos. El éxito descontrolado tiene su reverso tenebroso en la dinámica de poblaciones. Así pues, si establecemos una jerarquía sobre las leyes naturales y humanas, no sería el darwinismo sino la Termodinámica la que estaría en la cúspide.
Decía Einstein que un modelo debe ser tan sencillo como sea posible y tan complejo como sea necesario. Toda representación de la realidad es incompleta, pero reconocida la limitación, estamos preparados para realizar mejores y mas útiles aproximaciones. Podemos por tanto usar modelos termodinámicos para chequear fallos y contradicciones en los análisis basados en parámetros y variables económicas, sociales, políticas, legislativas, etc mediante representaciones lo mas isomórficas posibles. Podemos indagar así la "inconstitucionalidad" de nuestras normas, leyes o aspiraciones respecto a la "Constitución" Termodinámica. Esta técnica sencilla fue la utilizada para iniciar la búsqueda de una solución a la Paradoja de Jevons.
La caracterización de un sistema termodinámico abierto en relación al crecimiento físico y económico puede ser de gran utilidad para establecer los marcos de lo posible. |
Cuando el
sistema ya no dispone de energía para crecer ni
mantenerse
Un sistema como el actual capitalismo globalizado, está compuesto por una gran cantidad de sistemas menores que es posible caracterizar según variables geográficas, económicas, sociales, etc. Puesto que el crecimiento económico es condición imprescindible para que pueda funcionar, es útil plantearse lo que ocurre cuando ya no hay energía neta para que pueda crecer o mantenerse a escala global y se han agotado los márgenes para mejorar la eficiencia. En este caso, el crecimiento de unos subsistemas solo es posible a costa del decrecimiento de otros. Es el comienzo del canibalismo sistémico. Estados Unidos y Europa han respondido a la crisis mediante los llamados alivios cuantitativos, inyecciones de liquidez y otros eufemismos que se pueden describir en términos profanos como el equivalente a "imprimir dinero". El efecto conseguido no ha sido crear riqueza ni recursos, sino redistribuirlos con un aumento generalizado de las desigualdades sociales en el mundo. No solo acentuando las diferencias Norte-Sur sino también apalancando la extracción de recursos renovables con otros no renovables llevándolos mucho mas allá de su capacidad de carga. Lo que se obtiene con ello es la conversión de recursos renovables en recursos no renovables y finitos, agravando mucho más la situación en el avance hacia el colapso. Está claro que la opción correcta sería usar los recursos que no se renuevan en recuperar y sostener aquellos que si lo hacen y que serán en última instancia aquellos que nos queden. Es decir, deberíamos de dejar de hablar de conservación de la Naturaleza y lanzarnos a un ambicioso plan de recuperación de recursos renovables, manteniendo las áreas protegidas como reservorio de biodiversidad. Solo así podríamos llegar al final del descenso energético con posibilidades de mantener una civilización garantizando a su vez la conservación efectiva de lo que aún nos queda.
Caracterización de un sistema termodinámico con la variable tiempo. En este caso no solo incluimos la energía sino también la materia (recursos). |
A una escala mas local, como un país o una región, las políticas son mas concretas y los efectos mas evidentes. Desde el punto de vista económico se ha apostado por salvar lo definitivamente insalvable: los bancos y el sistema financiero. Ya se ha dicho muchas veces que el préstamo con interés necesita de un crecimiento infinito que entra en conflicto palmario con las leyes de la Termodinámica. Así pues, también a escalas locales se muestra el canibalismo sistémico, suavizado por la redistribución global propiciada por los "alivios cuantitativos", mediante la desigualdad social y la destrucción de las clases medias. Llegados a este punto parece que ya no pudierámos hacer nada, pero incluso en fases avanzadas del colapso hay sistemas que deben crecer y otros que desaparecerán de forma controlada o mediante colapso. Es decir, el decrecimiento conjunto, incluso controlado, mostrará asimetrías en subsistemas que no solo pueden crecer, sino que deben crecer para que el impacto de un largo y penoso colapso sea los mas llevadero posible. Así, la agricultura local no dependiente de recursos finitos debe crecer en detrimento de la agricultura industrial kilométrica dependiente de combustibles fósiles, los pueblos deberían crecer y las grandes urbes disminuir su población... Pero también deberemos evitar otras asimetrías que matan y nos dejarían inermes frente a los profundos cambios que vendrán, como ocurre con las desigualdades sociales.
Hay una resiliencia que construir y debemos entender y asumir que la sostenibilidad no es imposible, es inevitable. Todo el esfuerzo y los recursos que usemos en sostener lo insostenible no hace mas que restarlos a la necesaria transición. La Naturaleza no es artífice de otro castigo que las consecuencias de nuestros actos. Si quemamos un bosque tendremos un erial, si plantamos árboles tendremos un bosque.
La pretensión de este artículo no es convencer a economistas, sociólogos, políticos, religiosos, historiadores, legisladores, periodistas, élites o mayorías mas o menos silenciosas, de la existencia de los límites biofísicos, sino sugerir algunas herramientas de visualización de la mano invisible de la Termodinámica en las diversas representaciones de la realidad. El objetivo es que, como ocurre con un parabrisas transparente que se hace cada vez mas opaco y visible por las vísceras de los insectos estrellados contra el impenetrable cristal, no sea necesaria la destrucción absoluta de la sociedad y la civilización humana para que terminemos aceptando y corrigiendo nuestros errores.
Y que cada persona pueda indagarlos por sí misma.
Publicado en "Autonomia y Bienvivir"
Excelente artículo
ResponderEliminarSaluos